domingo, 31 de mayo de 2009
Edulcorante autorizado - Jorge X. Antares
La maestra vio como su alumno predilecto desaparecía convertido en una masa gelatinosa que se esparció por el suelo de la clase. Todo ocurrió después de ingerir esa nueva golosina en forma de diamante. El resto de los niños miró sus manos. Algunas tenían aun el dulce en ellas... Otras estaban vacías.
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